miércoles, 21 de septiembre de 2016

Capritulo -22: ¿Y ahora que? ..


 
 
 

El auto del Youtuber Mexicano se estaciono enfrente de la casa de Grey, como siempre la calle parecía desolada, y la casa de la joven no se presenciaba alguna señal de que sus padres siguieran despiertos, tenía prisa puesto que ya se le había hecho un poco tarde y ella estaba segura que su madre la esperaba adentro.



—Bueno, tengo que irme —hablo la chica sentada en el asiento de co-piloto mirando hacia enfrente y desviando en ocasiones su mirada a ver hacia su casa—Ya debería estar en la casa..

—Ah, sí, claro —dijo sonriente Gabriel sin dejar de mirarla—Espero y pronto pueda conocer a tus padres.

—Ah —se rasco la nuca algo insegura >>¿Conocerlos? Imposible, ellos siempre son…mi padre me avergüenza por ser tan despreocupado y mi mama es demasiado estricta pero…<< —Oh claro —lo miro abriendo sus ojos como plato—Si, algún día —apenas y sonrió, su celular de nuevo sonó, era otro mensaje de su madre—¡Ah ya tengo que irme! —exclamo mirando el mensaje y con su mano buscaba el seguro de la puerta.



Gabriel, salió de su auto e inmediatamente camino hacia el otro lado del vehículo para abrirle la puerta a Grey, pero antes de hacerlo ella la abrió sin avisar y lo golpeo en la entrepierna, él se quejó algo desconcertado.



—¡Ay, no mames! —casi grito, masculló algo adolorido se tocó la zona lastimada inclinando un poco su espalda.

—Oh, ¿no ves que voy saliendo? —reclamo y salió del auto despreocupada cerrando de trancazo la puerta—Ya, ya, perdón, ¿te dolió? —le pregunto queriéndose reír.

—¡Si! —Afirmo incorporándose pero aun algo adolorido—Bueno —trato de sonreír—¿Mañana podemos vernos para salir?

—¿Mañana? Bueno, sí, solo tengo que pedirle permiso a mi padre ya que mañana debo seguir trabajando en el gimnasio —le recordó de pie mirándolo de frente.

—¿No me habías dicho que tenías otros trabajos? —le cuestiono algo confundido.

—SI, los tenia, pero me corrieron.

—¿Por qué?.

—Solo por ser yo, ¿entiendes? —comento despreocupada.

—Rio divertido mirando de lado—Si, eso lo explica —sonrió divertido y pronuncio en voz baja—Seguramente nadie te soporto.

—Grey logro escucharlo y le tiro una patada cercas del tobillo molesta.

—¡Ay, vaya…¿Cuándo vas a cambiar de habito? Siempre me golpeas en el mismo lugar! —le recordó quejándose.

—Pues ya tu tobillo debió haberse a acostumbrado ¿no? No soy tonta, me di cuenta de tu burla —frunció el ceño y desvió la mirada—Después conseguiré otros trabajos, sola, yo sola, no necesito la ayuda de nadie.

—Bueno si tú lo dices —Respondió tocándose aun la zona dañada para luego tranquilizarse un poco, le tomo la mano con sus ojos brillando—Descansa mi amor, mañana te llamare para hablar de nuestra cita y..

—Si, si mañana, ahora tengo que irme.

—Buenas noches—sonrió chiveado ,agacho un poco su cuerpo debido a la baja estatura de Grey y cerro sus ojos frunciendo sus labios, acercándose a ella para darle un beso, y sintió la mano pequeña de la rubia acariciando su cabeza.

—Buen perrito, te veo mañana —alejo su mano de la cabeza del moreno y dispuesta camino hacia la puerta de su casa.



Gabo abrió sus ojos confundido y  algo molesto casi grito.



—¡Hey ,¿adónde vas, no te vas a despedir de mí?! —la siguió por detrás.

—¡Ya lo hice! —dijo algo molesta— Ya, tengo que entrar, tú no eres el que va a tolerar a mi madre enojada.

—Grey, no soy tu mascota, soy tu novio —le recordó siendo franco—Ven aquí —dijo y tomo su mano jalándola hacia él, acercándola a su pecho.

—¿Q-que? —apenas y pregunto algo nerviosa.

—Sin decir nada la beso para luego abrazarla.



Grey no correspondió, se sentía muy extraña, nunca había tenido un novio y de hecho no sabe lo que es estar con uno o como tratarlo, no dijo nada, Gabo soltó un suspiro.



—Estoy feliz, este día fue el mejor de todos para mí —dijo en voz baja recargado en el hombro de la rubia—S-solo quería que lo supieras —se separó y la miro sonriendo viendo fijamente sus ojos— Ahora sí, nos vemos  —acaricio su cabellos un poco—Gato —rio un poco y se alejó encaminándose a su auto.

—¡Ja! —solo una risa burlona >>Y tú eres un perro<< —Si, adiós —se despidió entrando a su casa y cerrando la puerta.

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Ya era otro día nuevo, parecía que el sol se ocultaba en ocasiones en las nubes, la mañana estaba tan tranquila y fresca, Mariand  Castrejón seguía molesta, demasiado molesta, no podía olvidar lo que hizo Gabriel frente a sus ojos, solo recordarlo se enojaba más, se sentía indignada, quería descubrir que fue lo que él vio en esa mujer de aspecto oscuro y personalidad explosiva, que después de tanto, al fin acepta, que su ex novio, realmente se enamoró de Grey, ahora se encontraba en su departamento terminando de grabar un video para su canal, ya que era viernes, un típico tutorial de los tanto que subía, de poco rato German entro ahora sin tocar, tomándola por sorpresa grabando.



—¡Van a ver que en cuanto lo hagan, les encantara guapuras, el diseño es chulo, chulísimo! —gritaba enérgicamente con esa voz tan chillona y demasiado aguda con una sonrisa extremadamente grande, mirando la cámara sin borrar la sonrisa, cuando giro sus ojos notando la presencia de German, viéndola algo serio, automáticamente su sonrisa se borró, y poniéndose de pie, detuvo su grabación, poniendo en pausa su cámara de video.

—Mariand —lo llamo el chico pelinegro pero ella lo interrumpió.

—¿Qué pasa?

—Yo, no estoy de acuerdo con lo que tienes planeado hacer, no está bien.

—¿Y si te pareció bien que ese tonto cara de chango me rompiera el corazón? —le recordó molesta.

—No, pero..

—Debe de pagar German, solo quiero eso, que page por el daño que me hizo —dijo comenzando a derramar lágrimas—¿Eso es tan malo?

—Mariand —German lo vio totalmente hechizado por ella, verla casi llorar, le rompía el corazón, solo se acercó a abrazarla.

—Tu estas de mi lado ¿no es así? —le pregunto conteniendo las lágrimas, no sabemos si eran reales o de cocodrilo.

—Sí, estoy de tu lado, Yuya.

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Grey se encontraba en el gimnasio, terminando con sus pesados y brutales ejercicios que su padre le sometía, ahora se encontraba cargando una barra con discos,32 Kl cargando en su espalda, su padre descubrió que su hija tenia cuerpo tipo Meso morfó, el cual naturalmente es un cuerpo de atleta y por ello al ser el cuerpo con más fuerza y agilidad, no dudo en ponerla a entrenar duramente desde los quince años hasta la fecha, y por lo tanto aunque fuera mujer, Grey era físicamente fuerte.

Al terminar, soltó un suspiro pesado dejando la barra con cuidado en el suelo tapizado de una alfombra color azul, incorporando su cuerpo y con sus manos se tocaba la espalda algo agitada del aliento, buscaba su botella de agua, viendo una sombra detrás de ella, se giró, era el Sr.Martin, sosteniendo su botella negra llena de agua helada.



—Intenta quitármela —le ordeno mostrándole su agua enfrente de su cara.

—¡Papá! —grito algo molesta y fastidiada.

—No dijo nada y se puso en modo de combate.

—Soltó un suspiro pesado y a gusto la liga con la que sujetaba su cabello en una coleta, dio dos pasos firmes dirigiéndose a él y con un salto, estiro su pierna queriendo dar una patada cerca de su cuello, pero su padre con una mano la detuvo y con la otra mano sostenía la botella, entonces ella saco un puño queriendo golpear su cara pero el hombre la esquivo.

—Vamos hija sé que puedes hacer algo mejor que esto —dijo riendo y la soltó.

—Estás loco padre —comento Grey cansada pero no se dio por vencida.



Se alejo para tomar distancia y corriendo de lado, impulsándose, salto lo más alto que pudo, casi haciendo una acrobacia, cayendo de pie y a espaldas del hombre rubio, lo tomo por el cuello usando un brazo, en un segundo uso una pierna estirándola enfrente y la paso rápidamente entre los pies del hombre, haciendo que callera de arrodillas, su padre trataba de zafarse de su agarre, ya estando así, la joven canadiense lo soltó y tomo ambos brazos ajenos, tirándolo al suelo boca abajo y sentándose encima de él, torciendo sus brazos, lo miro desde abajo sin moverse.



—Ya ríndete —pronuncio seria y con su voz grave pero femenina.

—E-está bien, Grey tu ganas —dijo y al fin dejo de moverse.

—Ella tomo la botella de agua y lo soltó poniéndose de pie.

—Él se recostó en el suelo riendo—¡Vaya paliza que me metiste ¿eh? Creo que ya me estoy haciendo viejo!.

—Rio un poco—Tu dijiste que podía hacerlo mejor y eso hice. —dijo y dio un trago grande de su botella con agua.

—Si —le dio la razón levantándose lentamente—Lo hiciste bien Hija —le sonrió viéndola de lado, masajeando su cuello.

—Gracias —termino de beber el agua se limpió el resto que quedo en sus pequeños labios con la manga de su sudadera gris, su celular sonó en modo de alarma, acercándose, lo tomo viendo la hora—Ya tengo que irme.

—Sí, solo deja las pesas donde estaban, pero recuerda que mañana seguirás con las clases —le recordó hiendo a la pequeña oficina.

—Si lo sé —dijo acomodando el equipo que había usado algo apurada >>Debo darme prisa, no pienso llegar tarde a una cita, de nuevo<<.

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Mientras, en el departamento, Alex, estaba sentado en sofá, hablando con su hermano  menor, los del Crew no se encontraban ahora, ya que estaban ocupados en proyectos individuales, el hombre de apariencia  robusta, se había quedado callado por un momento mirando seriamente a su hermano quien cepillaba su cabello frente a un espejo rectangular.



—¿Ahora si ya me dirás a dónde vas tan arreglado? —pregunto curioso.

—No exageres, no voy tan elegante —dijo riendo sin detener sus actos.

—Te veo más feliz de lo normal, bueno más bien días atrás estabas distante y triste, incluso en tu cumpleaños no te veías muy feliz ¿y ahora?.

—¿¡Ah sí ¿no te dije verdad!? —se giró a verlo sin borrar su sonrisa.

—Grey y yo somos novios —declaro viéndolo sonriente y emocionado.

—¿Qué? —Se puso de pie desconcertado—¿Me estas mintiendo?

—No —negó— Es real.

—¿Pero cómo, cuándo paso? —lo tomo de los hombros extasiado pero no parecía feliz.

—Bueno, pasó ayer, en la boda de Luis pero realmente…

—¿Cómo la conquistaste? Grey, su carácter es..
—Lo sé —dijo riendo—Pero es eso Alex, principalmente eso es lo que me enamoro de ella

—¿Su carácter difícil? —pregunto confundido y sin poder creerlo—Debes estar loco como para enamorarte de alguien así —voltio los ojos recordando que Grey para la mayoría era “insoportable”.

—Sí, de hecho si lo estoy Hermano —soltó un suspiro—Estoy loco por ella —rio como emocionado y Alex lo miro extrañado, Gabo regreso  a verse al espejo viendo detenidamente su cabello, frunciendo el ceño y algo desconcertados paso su mano por su flequillo y —¡Ah!! —grito sin dejar de verse al espejo, viendo sus entradas en el cabello.

—Se tocó el pecho asustado—¿Qué, por qué gritas?

—¡Mierda, me estoy quedando pelón! —grito totalmente aterrado.



Alex no  dijo nada y solo se tiro una carcajada pareciéndole divertido.

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Ya eran las 12:00 am, Grey se encontraba ya en su casa arreglándose, por primera vez no  se maquillo tan cargado los ojos, pero si los delineo, pinto sus pequeños labios de rosa pastel, se puso una camiseta roja con la imagen de un tigre color dorado, una chaqueta de cuero negra, unos shorts cortos de mesilla  junto con unas medias gris algo desgastadas y una botas rojas con agujetas, no se molestó mucho en su cabello, tan solo lo cepillo un poco, ya que naturalmente era ondulado y algo alborotado, aunque las ondas eran casi definidas, se miró al espejo, soltó un suspiro, se sentía algo extraña, ¿será porque nunca había tenido novio en toda la extensión de la palabra jamás  se había arreglado para alguien?, sin darse cuenta tomo su plancha de cabello y con ella marcaba mejor sus ondas de cabello naturales para verse más presentable.

Al terminar, bajo las escaleras y tomo su único bolso, pequeño y negro, colocándolo en su hombro derecho, viendo de nuevo la hora en su celular, para luego notar que su madre se encontraba en el patio de la casa, lavando ropa.



—¡Mama, ya me voy, dejas mi ropa para después yo lavarla! —grito desde las escaleras.

—¡Esta bien y en cuidado Grey, ya sabes y no llegues después de las 11:00pm ¿me oíste?! —grito algo histérica.

—¡Si ,lo sé! —respondió para luego bajar por completo las escaleras.



Camino hasta la puerta principal, giro la perilla, para salir de la casa y lo primero que vio fue a Gabo de pie con una sonrisa imborrable sosteniendo un ramo de flores parecían ser de lavanda, Siemprevivas, entre otras, Grey abrió los ojos como plato y se acercó un poco a él.



—¡Grey! —grito Gabo extremadamente feliz y la abrazo  para luego ver la a los ojos—Te traje esto —estiro su brazo entregándole las flores.

—Tomo el ramo en sus manos y lo miro con sus labios entre abiertos—Ah..G-gracias —apenas y dijo sintiéndose demasiado extraña >>Nunca me habían dado flores<< viéndolo fijamente por unos momentos ruborizada—Espera, l-las dejare adentro —dijo y se retiró corriendo.

—El noto su tartamudeo y sonrojo en sus pálidas mejillas, soltó una pequeña risa—Que linda.



Después, subieron al auto de Gabo y el sonriente mientras manejaba, veía de reojo a Grey, quien se encontraba sentada en el copiloto escribiendo algo en su pequeña libreta que siempre llevaba consigo a todos lados junto con una pluma negra.



—Mi amor —le hablo Gabo mientras conducía—¿A dónde te gustaría ir?

—A donde sea —dijo sin dejar de escribir ni despegar su vista de la libreta.

—Rio divertido —¿Cómo adonde sea, no tienes un lugar específico a donde te gus..? ¡Ah, ya se, vamos al cine!

—¿Cine? —levanto su mirada viendo al frente recordando—¡Oh sí! —Dijo haciendo un gesto como que había recordado algo—Hoy se estrena una nueva película de Dragón ball —grito exaltado y se giró a verlo.

—¿De verdad? Bueno entonces veámosla  y después vamos a comer ¿va? —le comento viéndola en momentos y sin despegar su vista de enfrente sonriendo.

—Sí, suena bien —dijo sonriendo muy leve.

—No he ido nunca al cine a ver una película de Anime.

—Es divertido, en esta película Goku se enfrentara a un dios de otro planeta que…



Grey comenzó a contarle a su novio de la sinopsis de la película, parecía algo emocionada, continuo hasta que se desvió del tema, haciendo señas algo caricaturescas, al parecer había visto ya demasiado Anime, aun así Gabo sonreía y en ocasiones se giraba a verla, le gustaba verla así, en sus ojos se notaba un brillo especial, que solo aquellos ojos azules de Grey irradiaban y lo dejaba totalmente encantado.



—De hecho hoy hay una convención de comics aquí, quería hacer cosplay de la maga oscura pero no tuve tiempo de hacerlo porque tuve muchos inconvenientes, de todos modos …—y siguió y siguió hablando.

—Aja, ¿Enserio? ya veo.. —contestaba Gabriel en ocasiones algo confundido puesto que a veces no comprendía nada de lo que la rubia le platicaba, por un momento su mente recordó su primer encuentro, cuando chocaron y el la llevo en su auto a su “destino” iban en el auto de Gabo pero ahora algo era diferente >>Aquella vez, lo recuerdo como si hubiera pasado ayer<<.

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—¡Ah, cierto que mal educado soy, hola me llamo Gabriel Montiel, puedes decirme Gabo!! -se detuvo en una señal de alto y alzo su mano para saludarla con una sonrisa.
—La chica solo miro su mano extendida, para luego desviar la mirada, sin responder el saludo, apenas contesto- Me llamo Grey -respondió en seco.
—Ah..bueno, un gusto..Grey..-le sonrió algo nervioso y bajo su mano la cual se la había dejado extendida.
—Vaya ese nombre no es Mexicano..-hablo el Wero sorprendido- ¿Eres de otro país verdad? -fijando ahora su mirada en la chica.
—Sí.
—¿De dónde eres? -le pregunto Gabriel curioso y continuo conduciendo.
—Canadá.
—Oh, vaya nunca lo pensé, es un país muy bonito por lo que me han dicho -comentaba el moreno sonriendo- Es casi invernal ¿verdad? eso explica tu piel tan pálida incluso es más paliada que la del Wero, entonces ¿te mudaste a esta país? -hablaba sin parar el blogger.
—Sí.
—Ah..-sonrió algo desconcertado pero no dejaba de mirarla.
—¿Gabo ya casi llegamos? -pregunto el Wero desde atrás.
—Si,ya casi -con testo para luego voltear a ver a Grey y sonreír le y ella solo giro su mirada melancólica viéndolo fijamente, haciendo que el borrara esa sonrisa, para volver su mirada al frente .
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Recordó soltando sin querer una risita sin despegar su vista, como ha pasado el tiempo y como se desarrolló tanto su relación que ahora están así, son novios ahora.



— ¿Qué están gracioso eh? —le cuestiono frunciendo el ceño.

—No nada —contesto sin borrar su sonrisa.



Al llegar a un cine-Vip, Gabriel camino tomado de la mano de la canadiense sin soltarla, había gente pero por suerte no habían reconocido a Gabo, alumnos por ahora, dejando a un lado a Grey esperando, el joven moreno pago las entradas y se regresó con ella sonriente.

—Listo, la función es en la sala B —dijo guardando las entradas en el bolsillo de su pantalón.

—Genial —pronuncio y se giró a ver dónde vendían las palomitas, refresco, dulces.

—¿Quieres algo? —le apunto algo curioso.

—Si, por eso me gire discretamente viendo hacia allá.

—Soltó una risa—Vaya que directa, ¿quieres palomitas?

—Sí.

—Bueno, vamos —dijo tranquilamente y tomo su mano llevándosela consigo.

—Ella no dijo nada y se dejó llevar, viendo la grande y morena mano del joven, tomando la suya, un leve sonrojo se asomo en sus mejillas, podía verse insignificante pero a hasta el más mínimo detalle, para Grey era mucho, mucho afecto.



Al llegar Gabo dejo que la chica pidiera las palomitas que quisiera.



—¿Qué va pedir? —le pregunto el cajero de cuerpo demasiado delgado y nariz aguileña.

—Ah, quiero las palomitas light con dos refrescos —ordeno la chica viéndolo despreocupada.

—Oh, muy bien —dijo sonriendo para luego girarse a ver a su compañero, dándole la espalda, toco el hombro de su compañero y le comento pareciéndole muy gracioso. —Mira, “palomitas light” —aplico énfasis y su compañero soltó una risita, al igual que él, riéndose burlonamente.

—¿¡Te parece gracioso imbécil de mierda?! —le cuestiono la chica azotando las manos en la barra de concreto en la cual tomaban las ordenes.

—No —negó el joven—Cálmese ya le tomare su orden de palomitas light —rio y le entrego las palomitas con los dos refrescos—Aquí tiene.

—Ella los vio y dijo —¡Estas no son light idiota, tienen una mierda de mantequilla encima!

—Grey.. —le hablo Gabo acercándose algo nervioso y serio.

—Sí, si son y ya puede irse, tengo más gente que atender, ahí están sus palomitas light  —exclamo riendo un poco el cajero viéndola.

—¡Te voy a dar tus “palomitas light” cuerpo de poste de luz, y después veras mucha palomitas flotando sobre ti hijo de puta, de mi nadie se ríe! —grito cabreada y tomo al sujeto del cuello de la camiseta, jalándolo hacia ella, fulminándolo con la mirada y le metió un puñetazo en la barbilla.



Gabriel noto esto y algo desubicado trato de hablar, pero al ver la situación, tomo a Grey de los brazos deteniéndola, las personas alrededor como siempre no hicieron nada solo algunas se alejaron tomando su distancia



—¡Grey no, detente! —le grito algo preocupado mirando a su alrededor al parecer no había seguridad cercas.

—¡Ah! —Grito el cajero por el golpe tocándose su barbilla, al parecer sus labios se habían partido—¡Eres un animal! —reclamo viendo a Grey muy enojado.

—Discúlpela es que …—decía Gabo algo inseguro.

—¡Suéltame! —gritaba Grey tirando patadas y dándola una cachetada a Gabo para que la soltara pero él no cedió.

—Un momento …—se acercó el compañero del cajero que ahora estaba golpeado—¡Eres el Werever, no es cierto, no puede ser! —grito emocionado.

—¿Qué? —pronuncio sorprendido el trabajador sangrando de un labio.

—Eh, si, lo soy, oigan, no, no hagan alboroto por esto solo..

—¿Me puedo tomar una foto contigo? —le pregunto el compañero sonriente.

—Si, si claro —dijo Gabo ignorando al cajero y soltando a Grey.

 —Carlos no jodas ¿No ves que me acaba de golpear está loca?

—Solo tráeme lo que te pedí —le ordeno Grey sonriendo un poco y cruzada de brazos.



El cajero empezó a escuchar las quejas de la gente que esperaba su turno, así que aun enojado, fue y regreso entregándola a la rubia las mentadas palomitas light



—Ya, ten bruja —se las entrego con pésima gana.

—Oh, ya era hora —le contesto la chica—A la otra mejor pórtate bien —tomo el pedido poniéndolo en una bandeja de plástico y se retiró.



Gabo la siguió por detrás encaminándose a la sala, algo avergonzado puesto que algunas personas los veían con extrañeza o desprecio pero a la canadiense parecía no importarle en lo absoluto.

Al llegar tomaron asiento en los lugares ya casi para salir de la sala, se podía ver toda la pantalla grande en todo su esplendo y también a las personas que estaban sentadas más enfrente, Gabo sonriente tomo la mano de Grey ella no dijo nada, se mantenía algo seria al parecer parecía nervios pero antes de que empezara la función, el comenzó a hablarle y ella respondía, cuando inicio la película se mantuvieron en silencio, pasaron los minutos, Grey parecía muy atenta a lo que veía no despegaba sus azulados ojos de la pantalla, el moreno en partes veía la película y en ocasiones la volteaba a ver, era inevitable para el no verla >>Que hermosa es, creo que es la novia más hermosa que he tenido, me siento tan afortunado<< pensaba en sus adentros cuando inevitablemente paseo sus ojos viéndole las piernas que se mantenían cruzadas, a pesar de que tenía medias algo oscuras sus piernas se veían torneadas y carnosas >>Que lindas piernas<< pensó con un ligero sonrojo en sus mejillas acercándose un poco más a ella mientras la rubia devoraba las palomitas, Gabo con picardía paso su brazo para rodearla por los hombros, mientras que con la otra mano la acercaba hacia abajo con la intención de acariciarle una pierna, pero..



—¡Vamos Goku, detrás de ti, pégale! —grito Grey casi poniéndose de pie, las palomitas se cayeron al suelo tapiado de alfombra, algo molesta sin despegar la vista de la pantalla.

—A-hh G-grey —tartamudeo algo desconcertado y cruzándose de brazos algo nervioso al ver que la chica hacia algo de escándalo mientras que varias personas ahí, la miraban algo extraño.

—¡Ahora haz la Genkidama  rápido! —grito de nuevo la chica sin darse cuenta de que no estaba sola.

—Grey —la tomo del hombro y la sentó.

—¿Qué, que pasa? —se giró a verlo algo molesta.

—¿Podrías bajar un poco la voz? —se lo podio en un tono dulce para no hacerla enojar.

—Oh, sí, si —reacciono apenas, recordando que estaba en un cine VIP y no viendo la televisión en su casa, relajando sus facciones soltó un suspiro y se acomodó en el asiento.

De rato llego un trabajador a limpiar las palomitas esparcidas en el suelo por los asientos de la pareja, Grey se había tranquilizado después de todo, ya estaba por acabar la película, solo en un momento el tomo su mano con firmeza y ella se giró a verlo a los ojos, a pesar de la casi oscuridad del lugar podía verlo bien, él se acercó y le dio un pequeño beso para luego sonreírle, Grey movía sus labios pero no podía sonreír tan brillantemente como el así que solo se acercó y recargo su cabeza en el hombro del moreno.



Al terminar la función, salieron de la sala, al igual que del cine en sí, estaba por llover de nuevo, por eso la chica se apresuró a entrar al auto de Gabo, Grey apenas y se sentó en el asiento de co-piloto y dijo.

—¡Vamos a la convención de comics Expo TNT! —le comento algo emocionada—Justamente hoy es el primer día.

—¿Asi? Vaya pues nunca he ido a una de esas convenciones, antes el Wero y Fede me invitaban pero siempre otras cosas que hacer o simplemente no me interesaba —respondió asegurando las puertas del auto y comenzando a manejas.

—¿De verdad? nunca has hecho nada interesante ni divertido entonces.

—¿Qué?

—Vamos, es genial y ahí podemos comer, venden Ramen, comida china, Onigiris, Sushi.. —decía mirando al frente recordando.

—Está bien pero, ¿Qué es el “Onigiri” y “Ramen”? —le cuestiono inocentemente.

—Soltó un suspiro tocando su frente—Creo que te falta aprender mucho. —sonrió leve y acerco su mano pellizcando un poco la mejilla del joven y el solo rio.

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Por otro lado un sujeto que parecía joven llego al departamento de Yuya, ella lo dejo entrar, él  se sentó en la sala y la chica castaña hizo lo mismo.



—¿Qué quieres Miguel, no ibas a verte con mi hermano? —le cuestiono algo altanera.

—Tengo algo que creo que te interesara

—¿Qué es?

—Saco su celular mostrándole unas fotos de Gabo saliendo del cine VIP junto con Grey—Un amigo de mi papa es Paparazi y logro tomar estas fotos escondido a cierta distancia.

—Abrió sus grandes ojos marrones como plato y rápidamente le arrebato el celular viendo las fotografías—¿Cómo sabes que me interesa?

—Bueno conocí a German hace tiempo y me dijo que si tenía algo que te sirviera a ti sobre tu “venganza” pues que viniera contigo.

—>>Gracias German<< —Necesito que se hagan virales ¿Cuánto quieres por publicarlas a Twitter?

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En la casa de Grey, la Sra.Martin se encontraba ahora haciendo ejercicio, tomo un pequeño descanso, aproximando sea la cocina por una botella con agua, cuando vio que el celular de su esposo estaba en la mesa, Grey había que su madre no respetaba la privacidad de los demás al ser tan posesiva y manipuladora, por eso nunca dejaba su celular al alcance de ella, mas sin embargo su padre Albert, no le importaba.

Sin pensarlo la mujer de cabello corto y rubia, lo tomo desbloqueando la pantalla, entrando a su Twitter que estaba abierto, el Sr.Martin seguía a Werevertumorro por lo tanto cualquier cosa en donde él era mencionado le aparecía en inicio, movió su pulgar para bajar de publicaciones y notificaciones, hasta que vio una fotografía en donde era mencionado Werevertumorro, pero era el tomado de la mano con su hija a pesar de que a Grey no se le veía el rostro bien, ella podía reconocer a su hija en donde quiera, sintió como su padecimiento de alta presión comenzaba a aparecer, toco su pecho algo adolorida sentía la sangre arder, ¿Cómo pudo su hija ocultarle que salía con un famoso de internet? Tenía tantas ganas de molerla a golpes y a la vez no.

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